¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Conectarse

Recuperar mi contraseña

A deal is a deal Onlineyf

¿Quién está en línea?
En total hay 121 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 121 Invitados :: 2 Motores de búsqueda

Ninguno

[ Ver toda la lista ]


El record de usuarios en línea fue de 125 durante el Jue Nov 21, 2024 10:58 pm
A deal is a deal Staffgs






A deal is a deal Sinttulo1ok

Últimos temas
» DNA: Omega Evolution (Afiliación Elite)
A deal is a deal Icon_minitimeJue Nov 14, 2013 11:52 pm por Invitado

» fairy tales returns elite
A deal is a deal Icon_minitimeVie Oct 18, 2013 9:50 am por Invitado

» Ciudad Silenciosa (Cazadores de Sombras RPG) ~ Afiliación Elite
A deal is a deal Icon_minitimeDom Ago 04, 2013 4:28 am por Invitado

» ¡REVIVAMOS STORYBROOKE!
A deal is a deal Icon_minitimeSáb Ago 03, 2013 9:00 am por Evelynn Stratford

» Creando Mundos [Normal]
A deal is a deal Icon_minitimeVie Ago 02, 2013 2:37 pm por Invitado

» Registro de nombre y apellido
A deal is a deal Icon_minitimeLun Jul 29, 2013 12:46 pm por Adah S. Hunter

» Registro de Empleo
A deal is a deal Icon_minitimeLun Jul 29, 2013 12:45 pm por Adah S. Hunter

» Registro de avatar
A deal is a deal Icon_minitimeLun Jul 29, 2013 12:41 pm por Adah S. Hunter

» Adah Samantha Hunter {ID}
A deal is a deal Icon_minitimeLun Jul 29, 2013 12:37 pm por Adah S. Hunter

A deal is a deal Twitterhd


A deal is a deal Evilregals


A deal is a deal 2ntl8n4
A deal is a deal Afiliadosjp


FatefulA deal is a deal 9010



¡Vótanos!

A deal is a deal

5 participantes

Ir abajo

A deal is a deal Empty A deal is a deal

Mensaje por Arthur S. Gold Jue Ago 09, 2012 9:42 am

Por supuesto que estaba al caso de todo lo que sucedía en Storybrooke, sobretodo de los hechos qu afectaban directamente a sus intereses. Era precisamente por eso que supo que Grace Sullivan estaba de parto antes incluso que llegara al hospital.

Había esperado el acontecimiento durante tanto tiempo que lo tenía todo perfectamente planeado. Porque aunque ella no lo recordara, como princesa Aurora había acudido a él para hacer un trato. Un trato para romper su maldición. Y él, cumplidor como nadie, la había llevado a conocer a su príncipe, que la había despertado de su sueño cuando lo había necesitado, así que ahora quería ver cumplida la otra parte del trato. El bebé le pertenecía, y importaba poco que estuvieran en el mundo real, lejos del Bosque Encantado.

Un trato era un trato.

El hecho de que la dulce enfermera se hubiera puesto de parto antes de tiempo, y que el bebé parecía no estar en la posición correcta para el parto y que tuvieran que llevar a Sullivan al quirófano para practicarle una cesarea no había sino facilitado todo el asunto. La trágica historia que todos conocerían sería que el pobre niño había nacido demasiado prematuro y no habían podido hacer nada para reanimarlo una vez su corazón se paró, demasiado débil para aguantar la intervención quirúrgica.

¿Que si tenía remordimientos por todo aquello? Por supuesto que no. Nadie había obligado a la princesita a acudir en busca de ayuda para aquella maldición que tanto la preocupaba. Aquello era sólo consecuencia directa de eso, y él no era el tipo de persona que olvidaba un trato.

Sus labios se curvaron en una sonrisa cuando una de las enfermeras a las que se había asegurado de hacer llegar una compensación económica importante le entregó el pequeño bebé que lloraba, haciéndole saber que se trataba de una niña.

Las demás complicaciones que habían tenido, como que el doctor Sullivan había querido entrar en el quirófano, que habían tenido que fingir que el bebé necesitaba oxígeno y que posteriormente le habían convencido que era mejor que no viera el cuerpo sin vida de la pequeña no fueron del todo de su interés. Para eso había pagado a quien había pagado, para que se hicieran cargo de ese tipo de problemas.

Él simplemente se alejó del hospital, con el bebé envuelto en una manta, dejando tras su espalda con lo que probablemente sería un drama familiar. ¿La verdad? Le importaba poco. Él ya había cobrado su parte del trato.
Arthur S. Gold
Arthur S. Gold
Hechiceros/Magos
Hechiceros/Magos

Soy : Rumplestiltskin
Mensajes : 23
Empleo /Ocio : Dueño tienda de Antigüedades
Fecha de inscripción : 26/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Vie Ago 10, 2012 1:22 am

Todo había ido muy rápido. Apenas había pasado un suspiro entre que había tenido contracciones en medio de la calle y que la entraban en silla de ruedas al hospital. Y aunque a raíz de todo lo sucedido aquella tarde seguramente su vida cambiaria radicalmente, que había visto como Sebastian caía inconsciente al suelo por culpa de la descargar que le había dado un policía y que Willow parecía furiosa contra ella, no podía pensar en nada. Su mente estaba completamente nublada por el dolor de las contracciones, que cada vez eran más fuertes y seguidas.

Apenas fue consciente de que la colocaban sobre una camilla, le cogían una vía en su brazo y le conectaban un suero. Alguien le levantó la camiseta y le colocaron la sonda del ecógrafo.
Intentó enfocar la cara de William cuando éste le dijo que el bebé se había atravesado y que no podría salir por si solo, y que la llevaban al quirófano para una cesárea, sin tiempo para que ella pudiera angustiarse demasiado por el montón de cosas que podían llegar a salir mal en todo aquello.

Nunca la habían anestesiado, pero según creía no se soñaba durante una operación. Había asistido a muchos ingresados a los que habían operado y nunca nadie le había explicado nada de sueños. El caso es que ella si lo tuvo; un sueño de lo más extraño en el que ella, vestida con un pomposo vestido rojo que se asemejaba más a un disfraz de princesa, de esos que se llevaban en Halloween, que a cualquier otra prenda que ella tuviera en su armario, hacía un trato con un ser repulsivo y inquietante. Las imagenes luego se volvían borrosas y poco definidas hasta que volvía a verse a ella misma frente a ese ser mientras él le decía que el precio de su trato sería el primer bebé que saliera de su vientre.

Era un sueño tan inquietante que su subconsciente luchaba por despertarse, nervioso por alejarse de todas aquellas imágenes que no tenían el más mínimo sentido y que no tenía ni idea de donde habían salido.
Poco a poco notó como su cuerpo iba respondiéndole y haciendo un esfuerzo empezó a abrir los ojos. Notaba su cuerpo débil y ligero, como si flotara por encima de las sábanas, seguramente a causa de los derivados de la morfina que le habían puesto para el dolor.
Notaba la presencia de alguien a su derecha, pero todavía no podía conseguir que su cabeza volteara a ver quien era. Quizás William... O Willow... O quizás ninguno de los dos porque ambos estaban furiosos contra ella.

- ¿Es... niño... o... niña? - consiguió articular. Fue más un susurro que palabras dichas en voz alta, pero había tanto silencio en la habitación que seguramente quien fuera que estuviera ahí la habría oído.
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Willow Swartz Lun Ago 13, 2012 6:45 am

Aquel había sido, simplemente, el peor día en la vida de Willow.

Descubrir a Grace y el hijo-de-puta-de-Jones, la llegada de William, la pelea, la interveción del gorila de Gascoigne y la llegada de la ambulancia... era todo eso mucho, mucho más de lo que ella a sus 19 años tenía idea de cómo manejar. La verdad es que todo le había sobrepasado y tras mirar su reflejo en la ventana de la ambulancia, pues había montado en ella junto con William, le había parecido ver más a un muerto en vida que a sí misma. Su expresión estaba totalmente perdida, como entumecida o carente de emoción. Tan sólo parecía reaccionar cuando algún grito de dolor por parte de Grace a causa de sus contracciones lograba erizarle la piel de la peor manera.

Estuvo ahí todo el tiempo, sentada en la sala de urgencias, con las piernas recogidas sobre la silla y abrazando sus rodillas. Sintiendo que, en verdad, en cualquier momento iba a romper a llorar. Nunca había sentido tanto miedo como cuando los doctores avisaban que algo iba mal con el bebé y que Grace tendría que entrar a cirugía de emergencia.

Enterarse de que la niñita había muerto...

Por dios que seguía furiosa con Grace por lo que había hecho, por lo que la descubrió haciendo. Pero aún así estaba con ella en esa habitación mientras la enfermera seguía inconsciente. William había salido y Willow no quiso indagar a donde. Con todo lo que había ocurrido no podía culparlo por necesitar estar a solar para procesar todo aquello. Lo que la joven rubia tenía muy claro era que por esa puerta Sebastian Jones no iba a pasar. No se lo iba a permitir. No sabía que sentir hacia Grace, esa era la verdad, pero no creía que nadie, por más ruin que se fuera, mereciera estar sola al despertar para enfrentarse a noticias como las que le esperaban.

Estaba sentada en el sillón junto a la camilla de Grace en esa habitación de hospital, donde no importaba que tan bonitos fueran los cuadros en los muros, seguía siendo fría e intimidante. Había encendido el televisor aunque no lo veía, sólo lo tenía así para escuchar algo más que no fuera el tenso silencio que alteraba más sus nervios de lo que ya estaban. Ni una sola campanilla en sus oídos desde que habían llegado a la sala de emergencias, pero eso era lo último en lo que pensaba. Estaba cubierta con una sábana, porque a pesar de que los pantaloncillos cortos y el top que llevaba estaban bien para correr, pero ahí adentro se moría de frío y se sentía casi desnuda.

Había estado pegada a su teléfono en todo momento. Aquello se le iba de las manos. No sabía que hacer para ayudar a William ni qué hacer con Grace. Seguro que Savannah sabría mejor qué hacer. A Felle le atacaba con un SMS nuevo cada 3 minutos poniéndola al tanto. Había hasta llamado a Khai, pero no le respondía, seguro que estaría con la estúpida de Mellington... A Alex le había pedido que fuera por ella, porque no podía con todo eso sola y necesitaba a alguien. Podrían decir que el problema no era suyo, pero Willow estaba tan metida como se podía estar, habiendo sido testigo de todo... era un golpe muy, muy duro...

Cuando escuchó que Grace se movía quedó paralizada de miedo. Volteó al instante a la puerta, deseando que William o alguna enfermera entraran, e incluso llamó a alguna esperando que se acercaran. No, por favor, que no despertara aún. No quería ser ella quien tuviera que decirle. ¿Y si la culpaba a ella por haberlos descubierto y desencadenar todo? ¿O a William por haberse peleado con Sebastian?

... o peor, ¿y si se culpaba ella misma porque su hijita no hubiera sobrevivido?

Se acercó temerosa, envuelta en la sábana. No quería ser ella, no quería... pero tampoco podía dejarla sin saber, ¿verdad? ¿Dónde estaba William? ¡Alguien! ¡Quien fuera!

- Ni-niña... - Respondió con voz temblorosa, ya sintiendo que el nudo en su garganta estaba por vencerse. - G-grace...algo salió mal y... -

No podía. No podía hacerlo.
Willow Swartz
Willow Swartz
Seres Mágicos
Seres Mágicos

Soy : Campanilla
Mensajes : 235
Empleo /Ocio : Técnica reparadora ordenadores
Fecha de inscripción : 26/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Vie Ago 17, 2012 9:43 am

La silueta de quien estaba en la habitación con ella fue volviéndose cada vez más clara a medida que se acercaba a la cama, y pronto reconoció a Willow.
No sabía como debía sentirse respecto a que fuera ella y no William quien estuviera ahí. ¿Eso significaba que estaba todo perdonado? ¿O que William la había dejado definitivamente, que no quería saber nada de ella y que la rubia estaba ahí sólo por lástima?

De alguna forma sentía la cabeza martilleandole de tal forma que supo que no podía continuar pensando en los porqués de esa situación. Lentamente empezó a mover una mano, para llevarla a su abdomen, que por primera vez en mucho tiempo no se notaba abultado, justo en el instante en que Willow le anunciaba que había sido una niña.

Sus labios se curvaron en una sonrisa, sintiendo que esa pequeña princesa le compensaba todos los momentos malos que seguramente estaban por llegar, con William y quizás también con Willow. En cuanto viera a la criaturita perfecta que había salido de su interior todo lo demás dejaría de ser importante.

- ¿Donde está? ¿Cuando podré verla? ¿Es...?

Las preguntas se detuvieron cuando Willow intentó empezar a contarle que algo había salido mal. Instintivamente pensó en el extraño sueño que había tenido, en el que un ser horrible se llevaba a su bebé a causa de un trato. El corazón se le encogió al instante y clavó una mirada suplicante en Willow, notando como una punzada de dolor en lo más hondo de su ser amenazaba con dejarla sin respiración.

- ¿Qué...?

Quería preguntar lo que había salido mal. Necesitaba saberlo, pero a la vez se sentía incapaz de acabar de formular la cuestión en voz alta. Si algo había pasado... No se lo perdonaría jamás. Porque habría sido por su culpa. ¿Que pasaba sino con la recomendación de nada de situaciones estresantes en el tercer trimestre de embarazo? Había jodido su matrimonio, había hecho que Sebastian fuera arrestado y que algo malo pasara a su bebé. ¿Que clase de persona horrible era? ¿Porque el destino no habría decidido que lo malo le pasara a ella y dejara a su princesa en paz?

- Ella... Ella está bien... ¿verdad? - dijo con voz temblorosa y con las lágrimas amenazando con querer salir de sus ojos.

¿De donde sacaría las fuerzas de seguir con su vida si la respuesta era negativa?
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Willow Swartz Vie Ago 17, 2012 5:21 pm

En cuanto Grace comenzaba a articular palabras, Willow sentía que su cuerpo se volvía de piedra. Tenía las piernas tan pesadas que era incapaz de moverlas para tratar de salir de ahí y evitar a toda costa tener que ser ella quien le diera las terribles noticias. Para la chica que no quería crecer, el tener que adoptar aquel papel iba mucho más allá de lo que tenía capacidad de mantener bajo control.

Agachó la mirada, inquieta, mientras se envolvía con más insistencia entre la sábana. Apenas miró a Grace de soslayo y con eso tuvo para que sus propios ojos comenzaran a enrojecerse y empañarse. ¿Que cuándo le iban a dejar ver a la niña? Ni siquiera estaba segura de que a William se lo hubieran permitido. No tenía idea de a quién de ellos se había parecido, si había nacido rubia o castaña o si su cabecita iba calva como la de muchos bebés. Lo que Willow sabía era lo que los médicos habían dicho, pero no tenía respuestas a las preguntas que Grace pudiera tener. Por eso insistía, no era la persona indicada para hacérselo saber, pero no parecía que nadie más estuviera dispuesto a hacerlo.

Tomó aire. Sintió que los labios le temblaban y para cuando volvió a alzar la mirada ya estaba al borde del llanto. Nada de eso serviría para Grace pero no podía evitarlo. Siempre había llevado sus emociones a flor de piel, y en una situación tan crítica como lo era aquella no iba a poder mantenerse estoica, sería incapaz.

- ... dijeron los doctores que... que sus pulmones estaban muy pequeñitos y débiles y ... trataron de hacerla reaccionar pero... - Pero había sido inútil. Hicieron todo lo que pudieron. Eso era lo que habían dicho. Y ahora Grace regresaría a una casa que tenía ya una cuna armada y un cuarto lleno de ropita para bebé, pero no llevaría consigo ningún pequeñito en brazos.

Aquello era demasiado cruel.

- ... pero... no pudieron reanimarla... - Ahí la voz ya se le había quebrado, incapaz de contener las lágrimas que rodaban por su rostro. - Lo siento tanto... -

¿Y ahora qué seguía? ¿Cómo se enfrentaba uno a eso? ¿La abrazaba? ¿Iba a buscar a William? ¿La dejaba sola para que lo asimilara? No era una persona religiosa, pero en ese instante se encontró rezando a todo lo que hubiera que rezar; por la niñita, por sus amigos que estaban ahora destrozados, y tal vez de una manera demasiado egoísta, que el día en que a ella le tocara enfrentarse a dolores de parto no tuviera que enfrentarse, jamás, a lo que Grace hacía ahora.
Willow Swartz
Willow Swartz
Seres Mágicos
Seres Mágicos

Soy : Campanilla
Mensajes : 235
Empleo /Ocio : Técnica reparadora ordenadores
Fecha de inscripción : 26/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Lun Ago 20, 2012 3:45 am

Aquello tenía que ser un mal sueño... Quizás todavía estaba bajo los efectos de la anestesia y lo estaba imaginando todo.
Cerró los ojos unos instantes aferrándose a aquella idea, esperando a que cuando los volviera a abrir hubiera una enfermera delante de ella con su bebé en brazos dispuesta a dejársela acunar. Oiría su llanto y todo estaría bien en el mundo.

Pero al abrir de nuevo los ojos nada había cambiado. Seguía en la misma habitación de hospital, con Willow delante mirándola con el horror pintado en su rostro, al borde del llanto mientras intentaba terminar de contarle lo que había sucedido.

Con un leve temblor, y como si su brazo pesara toneladas, alzó su mano derecha hasta cubrirse la boca, ahogando el gemido desesperado que salió de entre sus labios, mientras su mente todavía nublada por los anestésicos no conseguía dar un sentido a nada que no fuera que su pequeña había muerto. Que ni siquiera la conocería, ni podría estrecharla en sus brazos ni siquiera tener un poco de consuelo a todo lo que había sucedido aquella tarde terrible.

Dejó caer los hombros y el pelo le cubrió parte del rostro mientras las lágrimas empezaban a bajar por sus mejillas, mientras sentía un agujero en su interior que no creía poder volver a llenar nunca más, haciendo que creyera que nunca más podría volver a ser feliz.

- Ha sido... Por mi culpa. Yo lo merezco pero la pequeña... Ella no tenía ninguna culpa. - y no hablaba para Willow, sino más bien para ella misma.

Porque sabía que aquello era así. Si tan sólo hubiera seguido su camino hacía casa aquella tarde, todo lo que había sucedido no la habría alterado y... Quizás su pequeña seguiría a salvo en su interior.
Con la mano libre volvió a acariciarse el abdomen, y la falta de volumen hizo que su llanto se incrementara.

El destino había sido justo con ella, porque demasiado gente había sufrido por su culpa. William, Willow, Sebastian... No era una buena persona. Las buenas personas no hacían lo que ella había hecho y cualquier cosa mala que le sucediera en compensación era justa. Pero su pequeña... Su bebé... Ella era algo perfecto e inocente que había pagado por su estupidez... Y nunca jamás podría llegar a perdonarse a si misma.

Nunca en la vida se había sentido tan sola.
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Willow Swartz Lun Ago 20, 2012 3:21 pm

Y Willow comenzó a llorar cuando Grace se quebraba...

Las suyas eran lágrimas silenciosas, no los sollozos desesperados de una madre que acaba de perder a su hijo sin siquiera haber tenido la oportunidad de ver su diminuta carita. Algo habían dicho los enfermeros de que era mejor que no vieran el cuerpo inerte de la bebita, pero Willow no estaba tan segura. Creía que, de ser ella, se habría arrastrado hasta donde debiera hacerlo con tal de ver a su bebé. Pero eso era sólo una suposición. Ningún escenario que su mente pudiera llegar a recrear se compararía jamás con lo que Grace estaba atravesando ahora.

No supo que decirle. Y ni aunque hubiera tenido las palabras adecuadas habría logrado articularlas, porque su garganta estaba hecha un profundo y rígido nudo.

¿Que si había sido su culpa? ¡Y cómo decirle eso a una mujer que acaba de perder a su hijo! No, Grace no había puesto las cosas fáciles. Le había asegurado que entre ella y el hijodeputa no existía nada. Y había que ver nada más cómo se habían desarrollado las cosas. ¿Si se hubiera marchado con ella cuando Willow le jaló del brazo se hubiera evitado todo aquello? A saber. William igual hubiera llegado a su casa hecho una furia blandiendo las fotografías incriminatorias. Tal vez hubiera pasado lo mismo. Tal vez no hubiera pasado nada. Tal vez la niñita venía mal y ninguno de los doctores se había dado cuenta...

Estaba furiosa con Grace y eso no lo podía cambiar. Pero al mismo tiempo verla y escucharla de esa manera la estaba destrozando. Y la joven rubia permaneció ahí, petrificada, tratando de decidirse qué hacer, a que parte de sí misma escuchar, porque todo en su interior estaba hecho un cáos y no sabía qué hacer, tanto así que se sintió temblar a causa de la impotencia. Irse o quedarse o buscar al marido (¿o ex marido?) o a una enfermera que le diera un sedante. Callarse o intentar consolarla o mejor seguir llamando a alguien que tuviera más cabeza para esas situaciones. Ella no podía hacerlo, no podía. Era como si... como si su corazón no pudiera sentir más de una sola cosa a la vez, porque de lo contrario todo era demasiado confuso y quedaba paralizada del miedo.

... y trastabillando se sentó a la orilla de la cama y la abrazó, acercándole el rostro a su pecho. Estaba decepcionada, iracunda, muerta de angustia y de dolor y aquella sobrecarga de emociones le iba a matar seguramente...

...pero no podía dejarla sola ahora.
Willow Swartz
Willow Swartz
Seres Mágicos
Seres Mágicos

Soy : Campanilla
Mensajes : 235
Empleo /Ocio : Técnica reparadora ordenadores
Fecha de inscripción : 26/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por William A. Sullivan Sáb Ago 25, 2012 2:16 am

Me había quedado en un estado como de shock, sin saber como actuar ni que hacer. Aquel mensaje y aquella visión de Grace y Sebastian habían sido demasiado reveladores, como si me hubiesen quitado una venda que cubría los ojos y que, por fin, me dejaba ver las cosas claras y como eran. Nuestro matrimonio estaba destinado al fracaso, pese a los intentos que habíamos llevado a cabo ambos. Aún así, parecía que el destino nos tenía guardada un cruel final que ambos jamás nos hubiésemos imaginado.

De la impresión, había sido capaz de actuar como era debido. Si bien Grace me había engañado y estaba muy furioso con ella, aquel hijo que llevaba según parecía era mío y, pese a que no fuese así finalmente, no podía abandonarla a su suerte después de tantos años juntos. Aunque todo se fuera a la mierda nos unía algo más que unos papeles y unos anillos. Debía reconocer que no había sabido comportarme ya que debería haber sido yo el que la acompañase al hospital. Al fin y al cabo, era médico y debería saber que hacer en aquellas situaciones.

Estaba tembloroso por todo lo que había ocurrido. En mi mente lo único que existía era la idea de ir hasta el hospital para ver como estaba mi hijo y, si, también para calmar mis preocupaciones sobre Grace, saber si estaba a salvo. Pese a todo, seguía sintiendo algo de cariño bajo aquel mar de odio. Llamé a un taxi, descartando la idea de coger el coche en aquella situación, y me dirigí en seguida hacia el hospital.

Una vez estuve dentro del edificio sanitario, sentí la mirada de muchos compañeros míos como atravesándome y, acto seguido, desviándose y apartándose de mi camino. No pude evitar fruncir el ceño, preocupado por lo que había pasado. Me encaminé deprisa hacia la puerta de información para preguntar por la localización de mi esposa y así, pedirles que me dijeran que había sucedido. Ellas se negaron a decirme nada sobre su estado, pese a haberme reconocido, y me enviaron directamente hacia allí. En mi corazón algo me anunciaba, una sensación extraña, que algo no estaba bien. Justo cuando estaba llegando a la puerta, me encontré a un compañero mío al que pillé por banda para que me contase sobre lo sucedido. Estaba seguro que todo el hospital lo sabía. El pareció titubear unos segundos, pero al final me dio la terrible noticia. Sentí como si alguien me hubiese dado una patada en el estómago, un fuerte dolor, náuseas y un mareo comenzaron a dominarme.

Sin decir nada, tuve que alejarme de él e ir hasta el baño más cercano. Me acerqué hasta la wc y vomité como si realmente estuviese enfermo. Mi corazón palpitaba rápidamente, mis ojos se humedecían y se llenaban de lágrimas. Cogí algo de papel higiénico para limpiarme la boca y me dirigí hasta el lavabo para lavarme la cara. Me miré en el espejo antes de hacerlo e impulsivamente
le di un puñetazo al cristal que estalló ante el impacto, rompiéndose en pedazos y haciéndome algún corte. No había ni experimentado dolor - JODER - Grité, desesperado mientras abría el grifo y colocaba la mano bajo el agua, ya que estaba sangrando bastante. Abrí un botiquín que estaba colgado en la pared y me la vendé como pude. Después iría a que me diesen puntos. No paraba de pensar en Grace y en como debería estarlo pasando. - Es todo mi culpa.. mi hijo... - No paraban de llegar imágenes a mi mente sobre todo lo que había pasado y no paraba de culparme por ello. Sino me hubiese puesto allí, seguramente no habría dado a luz antes de tiempo y nuestro pequeño estaría a salvo.

Salí del baño y comencé a deambular por el pasillo hacia la habitación. La puerta estaba entreabierta y pude ver en su interior a Willow y Grace, que tenía un rostro pálico y con una expresión de pura angustia. Golpeé suavemente la puerta con mi mano izquierda, la sana, mientras reprimía una arcada. entré lentamente - Yo...- mi voz titubeó y se apagó. Sentía furia, rabia, despecho y, a la vez, una inmensa pena. Ahora no era el momento de discutir con ella. Ahora... solo sabía que debía estar ahí. No podía recriminarle nada. Ya sería el momento de hablar cuando hubiese pasado todo. Me acerqué hasta la cama con la mirada clavada en el suelo, sin ser capaz de mirar a ninguna de los dos mientras mis ojos volvían a llenarse de lágrimas. Tenía que ser fuerte por todos, no podía desmoronarme yo. No era lo correcto. - Si quieres que me vaya, lo entenderé... Solo he venido para saber si estabas bien - Ahora me sentía un poco estúpido ya que ahora mismo, seguramente fuera la persona a la que menos deseaba ver en el mundo. Todo había sido mi culpa.
William A. Sullivan
William A. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Prince Charming /James
Mensajes : 59
Empleo /Ocio : Médico
Fecha de inscripción : 23/08/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Sáb Ago 25, 2012 10:42 pm

Apenas fue consciente del momento en que Willow la abrazó. El dolor era mucho, demasiado. Tanto que las contracciones que había experimentado antes, que en su momento le habían parecido lo más doloroso del mundo parecían cosquillas en comparación al enorme agujero negro que se estaba abriendo en su pecho, y se hacía más grande cada vez que pensaba en que no iba a conocer a su pequeña. Que no vería su cara, que no escucharía su risa...

Hundió el rostro en el hombro de Willow mientras sus hombros se sacudían presa de un llanto silencioso, sintiendo que nunca podría dejar de hacerlo. Las lágrimas caerían eternamente de sus ojos porque nunca iba a superar ese dolor. Nunca podría volver a seguir con su vida como si nada...

No sabía porque Willow continuaba allí. Seguramente Grace era la última persona con la que quería estar y todavía recordaba sus gritos, llenos de rencor, antes de que todos los acontecimientos se precipitaran. Probablemente por pena, y ella odiaba dar pena. ¿Había algo más triste que eso?

Fue en ese instante cuando oyó como la puerta se abría. Su primer pensamiento fue que sería alguna de sus compañeras enfermeras que venía también a mostrarle lo apenada que estaba por lo sucedido, pero lo que no esperaba era ver a William allí.
Había supuesto que él ya no querría verla. La única cosa que les quedaba en común después de aquella tarde era su hija, y ahora incluso eso había muerto... No tenían porque verse, ni tenían porque herirse más...

Sin embargo una parte de ella se alegraba que él estuviera allí.

No, no lo amaba, y a veces tenía la sensación que los tiempos en los que lo había hecho de verdad eran sólo parte de un recuerdo que se desdibujaba cada vez más, perdiendo el sentido de la realidad, como si alguien la hubiera convencido de que lo hacía cuando en realidad nunca había sido así. Lo que sentía por William, más allá del rencor por todas las barbaridades que se habían terminado gritando esa tarde, era el cariño y la estima que se le tiene a alguien de la família o a tus amigos más cercanos... Pero evidentemente un matrimonio no puede funcionar con eso... Y menos cuando lo que se suponía que debía sentir por William lo sentía por cierto profesor de sonrisa afable que había resultado ser su punto de apoyo en los últimos meses... Quien daba sentido a todo y le daba fuerzas para volver a casa y continuar fingiendo que todo estaba bien con su convivencia con William y que no notaba como cada vez se distanciaban más y como él se pasaba horas y horas fuera de casa.

Sin embargo nada borraría lo que habían vivido. Sus años de matrimonio habían estado ahí y pese a todos los reproches que tenía por hacerle, no habían sido malos años. Él era un buen hombre que siempre la había tratado bien, y no se merecía todo lo que ella le había dado: le había engañado con otro hombre y por su culpa su hija había muerto...

- Creía que serías tu quien no querría estar aquí... - dijo casi en un susurro mientras lágrimas silenciosas continuaban bajando por sus mejillas sin que ella pudiera hacer nada para detenerlas. - Quédate... Quédate por favor...

No tenía ni idea de que podrían decirse, o si en realidad su mútua presencia les haría algún bien... Pero de algún modo sentía que William era la única persona en el mundo que podía entender como se sentía en esos momentos.

- Era una niña y... - la voz se le quebró antes de poder llegar a continuar - Ya sé que esto no sirve de mucho pero... Lo siento mucho. Siento por todo lo que te he hecho pasar... Todo es por mi culpa. - fue todo lo que pudo decir antes de que los temblores a causa de sus lágrimas la dejaran definitivamente sin voz.
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Willow Swartz Dom Ago 26, 2012 5:50 pm

No, no era lástima lo que sentía por Grace, pero tampoco era capaz de definir exactamente de qué se trataba. Se sentía decepcionada por ella y defraudada, porque le había tomado el pelo. Sentía angustia por William, porque él también era amigo suyo y de alguna manera ella quedaba en medio. ¿Y si le hubiera dicho antes que Grace traía algo extraño con Jones las cosas habrían sido distintas? Se habrían peleado, seguro, pero no habrían escalado las cosas a tal punto de gritarse todos en un parque y de que los dos hombres se fueran a los puños como hicieron. Le dolía verla así, inconsolable, y le dolía muchísimo por la pequeñita que tan esperada había sido. Era todo tan abrumador que no podía ni siquiera pensar con claridad.

No obstante no dejó de abrazarla. La estrechó más contra sí cuando la sintió sacudirse entera y Willow pensó que eso, físicamente y con una herida fresca en el vientre debía se ser endemoniadamente doloroso, aunque no tanto como recibir las noticias que había tenido que darle, seguro. Sus propias lágrimas caían una tras otra en silencio en su rostro.

Que cruel podía ser la vida a veces.

Escuchó entonces que la puerta se abría.Ver a William, en otra situación, habría sido garantía de dibujar una sonrisa en el rostro de la joven rubia. Ahora lo único que sentía era dolor, y al ver la expresión en su rostro tuvo que morderse los labios para no comenzar a sollozar también. Reparó también en el vendaje en su mano, pero preguntarle qué había pasado en esos momentos estaba de más.

Soltó a Grace con suavidad mientras intercambiaban palabras, clavando la vista en las sábanas de la camilla. Era irónico. No hacía más que quejarse y asustarse por las cosas que escuchaba en alucinaciones, pero ahora tenía horas de no escuchar un solo tilín de campanita, y ese silencio lo encontraba hasta perturbador.

Se secó las lágrimas del rostro al escucharlos. Si William iba a quedarse ella tenía que irse. No sabía si las reglas de un solo visitante a la vez aplicaban en mujeres recién salidas de una cesárea, pero más allá de la política del hospital, ahora mismo ellos dos necesitaban estar solos y llorar. Claro que le preocupaba el estado de William considerando todo, pero lo que acababan de perder era algo que solamente ellos podían entender en toda su magnitud. Había sido su bebé, el de ambos. Necesitaban asimilarlo y sufrirlo en privacidad.

- Yo... los dejo solos. Quieren que... ¿llame a alguien? - No fue capaz de mirar a ninguno de los dos a la cara. Pero tras que le repondieran se acercó a William, le dio un corto pero fortísimo abrazo y salió en silencio de la habitación, cerrando con cuidado la puerta tras de sí.

... no avanzó ni siquiera un par de metros antes de apoyarse contra un muro y dejarse caer al suelo, ocultar el rostro entre sus manos y ahora sí, echar a llorar. Debió haber abierto la boca después de que Grace le mencionara a Jones por primera vez y quizá todo eso se hubiera podido evitar...

Pero ya no quedaba nada más que hacer, por lo menos para ella, que llorar, esperar a que alguna enfermera le dijera que no podía estar ahí y llevara de vuelta a la sala de espera, y aguardar a que Alex le recogiera...

Y allá afuera, Storybrooke seguía como si nada hubiera pasado.

Willow Swartz
Willow Swartz
Seres Mágicos
Seres Mágicos

Soy : Campanilla
Mensajes : 235
Empleo /Ocio : Técnica reparadora ordenadores
Fecha de inscripción : 26/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por William A. Sullivan Vie Ago 31, 2012 2:19 am

La habitación parecía estar completamente helada. No había ningún tipo de sensación cálida, risa ni alegría en nuestros rostros. Solo se reflejaba el dolor que sentíamos, quedaba patente para aquel que pasara y nos viera que algo terrible había ocurrido. Y así era efectivamente.

No me había sorprendido ver a Willow en la habitación, ya que ella había estado presente cuando todo aquello había ocurrido. En cambio, si que rondaban por mi cabeza pensamientos de que había tenido que haber estado por allí y no lejos de Grace. Puede que me sintiese mal y traicionado por su culpa, pero lo que había ocurrido era más grande que aquellos sentimientos que sentía hacia ella. Además, éramos dos personas adultas que habían compartido gran parte de su vida juntos. Y si algo podía decir, es que la conocía y sabía que interiormente tenía que estar desolada. Pese a todo, no podía marcharme de allí y abandonarla así. En algún momento habíamos sido sinceros y habíamos tenido algo bonito, y no quería echarlo a perder por esto. Nos necesitábamos.

Seguía con el rostro clavado en el suelo cuando Grace me pidió que me quedase. Al escuchar su voz tan quebrada y vacía a la vez sentí como se me rompía aún más el corazón. No había sido nada justo lo que había ocurrido. Pese a todo lo que había ocurrido no creía que mereciésemos aquello. - No te preocupes, me quedaré todo el tiempo que quieras, no me voy a ir a ningún lado - Dije tranquilamente, intentando que mi voz no reflejase el torbellino de tristeza y angustia que me asolaba, no permitiendo que se notase lo roto que estaba por dentro.

Escuché las siguientes palabras de la rubia sin poder evitar que una lágrima le recorriese la mejilla. Otra punzada de culpabilidad lo abatió y sintió un dolor agudo en el pecho - No ha sido tu culpa... yo no debería haberte gritado tampoco tanto... - No sabía que decir. Tenía la boca seca y no tenía la fluidez normal que solía caracterizarme. Noté como Willow se levantaba de la cama y se acercaba a darme un abrazo. Coloqué mis brazos alrededor de su cintura, abrazándola con fuerza - Gracias por todo... - Dije con un hilo de voz en su oído. Había decidido no decir nada ante la petición de Willow: su mente estaba demasiado ausente respecto al resto de la gente, solo tenía parte de mi atención focalizada en Grace.

Una vez Willow se hubo marchado me acerqué hasta la cama donde Grace reposaba y me senté con cuidado a su lado. Mi mano sana buscó la suya y se la agarró con fuerza - Grace... si te sirve de algo, creo que habrías sido muy buena madre. - Elevé mi rostro y la miré fijamente a los ojos por primera vez desde que había entrado. No sabía si podría resistirlo mucho tiempo sin derrumbarme yo también - Lo importante ahora es que tú te recuperes, y para eso no puedes estar en este estado. Tienes que intentar comer y mejorarte... Eso es en todo lo que debes pensar, no sé si podría soportar pasar lo de hoy otra vez. No podría ver como se muere alguien tan cercano a mí... Tienes que prometérmelo. - Mis labios parecían moverse con dificultad al estar tratando de ahogar aquella emoción que intentaba aflorar de lo más profundo de mi ser. Me estaba destrozando por dentro. - Estaré aquí cuando me necesites, no voy a dejarte sola.. ¿de acuerdo?
William A. Sullivan
William A. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Prince Charming /James
Mensajes : 59
Empleo /Ocio : Médico
Fecha de inscripción : 23/08/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Vie Ago 31, 2012 10:38 am

William parecía tan sereno que ella no podía dejar de sentirse más conmocionada de lo que ya estaba. Porque ella no podía pensar con claridad y, desde luego, no podía dejar de llorar. Las lágrimas habían continuado bajando silenciosas por sus mejillas aunque el temblor que sacudía su cuerpo se había calmado un poco.

Sólo alcanzó a dedicarle una débil sonrisa a Willow cuando la oyó decir que les dejaba solos. Quería agradecerle ella también por todo lo que había hecho, por no dejarla sola cuando seguramente lo único que tenía ganas de hacer es salir corriendo de ahí y olvidarse de todos los horrores que había vivido. Ella misma lo habría hecho de no estar todavía medio sedada en una cama de hospital. Sólo que por mucho que corriera nunca podría alejarse de todo aquello. La muerte de su niña pesaría para siempre en su consciencia.

Cuando William se sentó a su lado, fue incapaz de aguantarle la mirada por mucho tiempo. Porque si de algo estaba segura es que no merecía toda esa consideración y ternura que él estaba mostrando para con ella. Como tampoco le merecía a él.
¿Porque no podía amarlo como recordaba que había hecho? ¿Porque su corazón se empeñaba en ponerle las cosas complicadas? ¿Porqué tenía que obligarla a quererlo como a un hermano o un amigo con el que has compartido media vida, pero no como a un marido?

Mantuvo los ojos fijos en la sábana blanca de la cama de hospital mientras le oía intentar hacerle prometer que iba a comer e iba a superar todo aquello. Ojalá hubiera sido tan fácil como decirle "Sí, no te preocupes. Voy a estar bien.", pero la verdad es que no sabía como hacerlo, ni si tenía las fuerzas para hacerlo.
Y cuando él le aseguró que no iba a dejarla sola y que estaría ahí para lo que necesitara no pudo evitarlo y se inclinó para abrazarlo, hundiendo el rostro en su hombro, mientras se aferraba con fuerza a su camisa y volvía a sollozar.

- ¿Como se hace eso? ¿Que hay que hacer para intentar superar todo esto para poder mejorar? Yo no... No sé si... Es demasiado horrible...

Lo preguntaba en serio. Al menos William parecía estar llevándolo bastante mejor que ella y realmente quería saber si había algo que ella pudiera hacer para evitar sentir aquel dolor que parecía estar desgarrándola por dentro y parecía que incluso le dificultaba el respirar con normalidad.
¿Estaría él sintiendo lo mismo? De todas las personas del mundo, seguramente William era el único que pudiera comprender como se sentía, y lo imposible que le parecía poder seguir adelante después de aquello.

No pretendía que él se preocupara, ni mantenerlo más al pendiente de ella de lo que debería. Pero no quería mentirle. No le diría que iba a estar bien cuando sentía que nunca jamás podría llegar a estarlo de nuevo. La sola idea de comer le daba escalofríos y como un acto reflejo, notaba como el nudo de su estómago se hacía un poco más fuerte. No... No podía prometerle que iba a recuperarse.

- Hace unas horas estaba dando patadas en mi barriga y ahora...

No pudo continuar. No podía siquiera mencionar en voz alta lo que había pasado, y simplemente dejó su cabeza apoyada en el hombro de William mientras intentaba controlar por enésima vez aquella tarde sus lágrimas, no como un gesto romántico, sino simplemente en busca de ese consuelo que creía que jamás podría llegar a encontrar.
Fue entonces cuando se dio cuenta de su mano vendada y eso bastó para que levantara la cabeza de su hombro y le mirara directamente a los ojos, esta vez sin apartar la vista.

- ¿Que te ha pasado en la mano? ¿Alguien le ha echado un vistazo a eso? - porque a pesar de todo había una cosa que era segura. Se habían pasado años conviviendo y le conocía lo bastante bien como para saber que médicamente se descuidaba a si mismo. Cualquier herida, cualquier problema era secundario. Y tal vez, y sólo tal vez, pensar en su herida alejaria parte de su mente del dolor que parecía ocupar cada rincón de su ser.
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Siobhan R. Mills Jue Sep 06, 2012 1:50 am

Me había enterado. ¡Por supuesto que me había enterado del incidente que había ocurrido hacia unas horas en el parque! Lo que no supe hasta que llegué al hospital y una de las enfermeras me informó, fue que el bebé de Grace Sullivan al parecer había “muerto” durante el parto. Tuve que hacer gala de aquella teatralidad que tanto me caracterizaba y fingir que aquello me entristecía y que era algo horrible. Realmente HORRIBLE. ¿La realidad? Por dentro sonreía y tenía que admitirme a mí misma que aquel golpe de Gold había sido efectivo y muy bien estudiado…, él se llevaba su beneficio y yo por mi parte conseguía que Grace nunca tuviese su final feliz…

Oh… Ella ni siquiera sospechaba que la mujer de cabellos rubios que caminaba ahora por los pasillos con una ligera sonrisa y un rostro lleno de preocupación por uno de sus ciudadanos (se me conocía especialmente por preocuparme por ellos, claro que ellos no sabían que lo hacia para mi propio beneficio) era la misma persona que había provocado todo aquello. Sí, yo había sido la que le había mandado aquel anónimo a William Sullivan, la que había hecho que él descubriera lo que se traía Grace con aquel desgraciado de Jones… Jones, aún tenía que mantener una charla con él para decirle que no volviese a darle a mi hija libros que pudieran meterle ideas absurdas en la cabeza.

Cuando me habían llamado informándome del altercado en el parque. Solo en mi despacho de casa no pude evitar esbozar una sonrisa triunfal, después de todo, aquellas pruebas que me habían llegado la mañana que Seery había aparecido en mi despacho habían sido el punto de partida de todo lo que había pasado esa tarde de domingo. Había dicho a Paula que me marchaba un momento y que bajo ningún concepto saliera de casa y me había dirigido presta al hospital.

No, no era amiga de Grace, pero bueno…, quería, necesitaba hacer algo. Sabía que él no iba a estar en esos momentos en el hospital, por lo que no me lo iba a encontrar. Cosa que me iba a suponer un alivio. Todo era demasiado extraño y cuando algo se escapaba de mi control como se me estaba escapando aquello intentaba evitarlo lo máximo posible. El problema era que sabía que no podría hacerlo siempre.

Cuando llegué a la planta de maternidad pude ver a Willow Swartz desaparecer por el pasillo y supuse que Grace estaría sola. Error. Cuando llegué hasta la habitación que me habían indicado, comprobé que no estaba sola y que William se encontraba con ella. Perfecto. Aquello simplemente a mi modo de ver en ese momento era una baza a mi favor. Toqué con los nudillos en la puerta y entré segundos después con un ligero atisbo de sonrisa en mi rostro.

Verla de aquella manera me recordó a mí misma, al día que tuve que renunciar a mi propia hija, por “un bien mayor”, apreté ligeramente los labios sin ser plenamente consciente de ello antes de acercarme unos pasos hasta la cama de Grace – Ha llegado a mis oídos lo que ha pasado esta tarde… Lo siento mucho. Una mujer nunca debería pasar por esto – Y menos después de haber cargado nueve meses con la criatura en su vientre. Quizás… algo en el fondo de mi mente me había llevado hasta allí y no solo el quedar bien delante de mi pueblo, sino el hecho de que yo misma había pasado por ello. – Sé que no es mucho… - Le mostré un ramo de flores que llevaba en la otra mano y se lo deje sobre la mesita de noche. Un poco de color en esas situaciones siempre iba bien – Lo siento mucho Dr. Sullivan – Dije entonces volviéndome al hombre. – Lo importante ahora es que te pongas bien… - Volví a decir volviendo el rostro hacia Grace, viéndome ligeramente reflejada en aquel dolor y aquellas lágrimas que llenaban su rostro – Al menos os tenéis el uno al otro – Más de lo que yo había tenido. Yo le había perdido para siempre – Eso es lo importante, tener a alguien en quién apoyarte… - Le sonreí afablemente – Siéntete afortunada de tener un marido como William que no te dejará sola…

¡Oh si! Aquellas palabras estaban dichas con la intención de que no rompiesen aquello que tenían…, de ninguna manera él podía encontrarse con mi querida Blancanieves. Y si eso no funcionaba…, bueno tendría que recurrir a otro tipo de artimañas.
Siobhan R. Mills
Siobhan R. Mills
Reina
Reina

Soy : La Reina
Mensajes : 168
Empleo /Ocio : Alcaldesa
Localización : Storybrooke, Maine. United States of America.
Fecha de inscripción : 05/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por William A. Sullivan Dom Sep 09, 2012 9:47 am

En este momento comprendía perfectamente lo que podían llegar a experimentar mis paciente y los acompañantes. Aquel penetrante dolor que parecía propuesto a intentar destruir todo a su paso acompañado del sentimiento de inexorable vacío. Era una mezcla y un cúmulo de sentimientos que no llegaba a comprender del todo. Una parte de mi simplemente quería dejarse llevar por todo aquel dolor, gritar y dejarme consumir por la ira en busca de un consuelo, intentando protegerme tras el velo de algún sentimiento más fuerte. Mi parte racional me decía que aquello solo empeoraría las cosas, que no servía de nada. Ya lo había comprobado antes, golpeando el espejo. Había sido un fugaz reposo, un alivio fugaz que había sido más un placebo que una solución eficaz. Los pensamientos se me atascaban en la mente, intentando salir a borbotones pero sin llegar a alcanzar una idea concisa, clara, de lo que se suponía que tenía que hacer ahora; de como tenía que sobrellevar aquel duelo.

Pero todo aquello tenía que permanecer oculto bajo aquella capa de autocontrol y falsa frialdad que había contruido a mi alrededor. ¿No era aquello lo que se esperaba de mi? Autocontrol, saber mantener la calma, pensar racionalmente. Eran caraterísticas innatas en mi: siempre había sabido qué hacer en todo momento, cómo comportarme. Seguramente aquello fuese más un mecanismo de autodefensa combinado con el deseo de no angustiar todavía más a Grace. Alguien debía de ser capaz de sacarlos de aquella situación, de no perder el norte; y ese era el papel que me había tocado actuar. Mi cabeza me decía que estaba experimentando un gran shock post-traumático, que debía de intentar sacarlo fuera en vez de retenerlo todo en mi interior. Pero no me parecía la opción correcta.

Grace parecía incapaz de aguantar mi mirada. El dolor en su rostro era claramente visible, y la culpabilidad. Querría ser capaz de poder decirle que no pasaba nada pero sabía que no era cierto. Habíamos perdido a nuestro bebé, ella había estado jugando a mis espaldas con Sebastian... Y aquello último era algo que no le podría perdonar. Aunque ya habría tiempo de limar aquellas asperezas más adelante, no ahora. No era el momento apropiado. Mis palabras parecieron afectar a Grace, ya que se abrazó a mi sollozando. No pue evitar abrir mis ojos, sorprendido. Por un segundo mis brazos titubearon aunque acabaron rodeando con cuidado a Grace. - No hay nada que se pueda hacer más que dejar que pase el tiempo... - mi voz se apagó. Pude sentir como mis ojos se llenaban de lágrimas y tuve que hacer un gran esfuerzo para no romperme yo en aquel momento. Suspiré profundamente intentando recuperar el control sobre mi mismo otra vez, para continuar hablando - Además, tienes buenos amigos que se preocupan por ti. Sé que a ellos, como a mi, no les importará estar aquí y dejaran que te apoyes lo que necesites... Eres una mujer fuerte, pero es importante que te recuperes. Con una noticia triste ya es suficiente y no me gustaría que a ti te pasase nada malo por esto - Las últimas palabras habían sido casi como un susurro, perdiendo intensidad. Pese a todo, no podía negar el cariño que sentía por ella. Y solo con imaginarme que podría llegar a pasarle algo malo... La perspectiva de mi vida se volvía todavía más oscura.

Cuando pronunció las siguientes palabras, sentí como si algo en mi interior acabara de romperse. Las patadas de la niña... Jamás llegaría a ver la luz del sol, jamás podría sacarla a pasear en el carrito que Willow le había comprado ni podría jugar con las cosas que Evelyn les había regalado... La sola imagen de aquellas cajas, que tanta ilusión me habían hecho unos días atrás, ahora rasgaban su alma. Solo salió de su ensimismamiento ante la pregunta de Grace sobre como se había hecho lo de la mano. Sentí su mirada penetrante, ávida por enterarse. - Yo... - Balbuceé. No podía decirte que de la frustración que había sentido hoy, por toda aquella rabia, había decidido canalizarla contra aquel espejo. Todos los sucesos que habían acontecido y que habían provocado que, por primera vez en su vida, me sintiese completamente solo y vacío. La traición de su mujer, la muerte de su pequeña... Habían provocado que simplemente sintiese como si tuviera un agujero negro tragándoselo desde dentro. - Cuando me dijeron lo de la pequeña... No pude controlarme y lo pagué con lo primero que encontré - De esta vez fui yo quien no pudo aguantar su mirada y tuve que desviarla. Sí que sentía algo de dolor en ella, pero era casi inapreciable en comparación al resto de las cosas.

No quería que el tema de conversación girase en torno a mi herida. Grace se preocupaba mucho, en especial con ese tipo de cosas ya que yo era más pasota. Y en esta ocasión debía de reconocer que me importaba todavía menos que otras veces. Fue entonces cuando sentí una voz conocida a mi espalda. Giré mi cabeza y vi la esbelta figura de la alcaldesa en el interior de la habitación. Me sentí aliviado ya que eso se podría traducir en no dar más explicaciones. - Señora alcaldesa, es usted muy amable. Muchas gracias. - Intenté esbozar una sonrisa, aunque habría jurado que mi rostro había permanecido completamente impasible, sin mostrar ningún tipo de emoción en él. - Ha tenido mucha consideración por venir hasta aquí a ver a Grace, le estoy muy agradecido - dije cordialmente. Realmente, si lo agradecía pero en aquel momento cualquier intento de ser afable o cálido, parecía simplemente eso: un intento.
William A. Sullivan
William A. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Prince Charming /James
Mensajes : 59
Empleo /Ocio : Médico
Fecha de inscripción : 23/08/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Grace E. Sullivan Jue Sep 13, 2012 3:15 am

Dejar que pasara el tiempo... Eso desde luego si podía hacerlo, a pesar de que dudaba que sirviera de algo. Nunca olvidaria lo sucedido... Y Dios sabía si es que algún día podría llegar a aceptar que otro bebé creciera en su vientre algún día (si es que alguien alguna vez quería volver a intentar formar una família con ella después de lo sucedido). Porque cualquier bebé que viniera a continuación no sería ella, su pequeña, aquella que había esperado con tantísima ilusión...
A pesar de todo no podía ser tan egoísta como para creer que era la única que podía sentirse desgraciada por aquello. William tenía razón, para la gente que la quería (si es que quedaba alguien después de todo aquello) debía ser fuerte. Debía aprender a aparentar que lo superaba aún cuando por dentro se sintiera incapaz de volver a unir sus pedazos.

- Supongo que intentarlo no me matará... – dijo haciendo referencia a lo de superar todo aquello. Al menos en eso intentaria no fallarle a William, ya que lo había hecho con todo lo demás...

Quería decirle muchisimas cosas más. Quería pedirle disculpas por haber sido tan mala esposa, pero también quería preguntarle si sólo había sido en su cabeza que su relación hacía mucho tiempo que había dejado de ser la que debería haber en un matrimonio y pasaba a ser la que tendrían dos buenos amigos, dos compañeros que habían decidido compartir la vida sin ninguna aspiración romántica. Sin embargo no tenía fuerzas para hacerlo. No aquella tarde. No en esos momentos.

Negó ligeramente con la cabeza cuando él le explicó que había golpeado quien sabe qué, llevado por la frustración. Para ella era muestra suficiente de en qué modo le habían afectado las cosas, porque William no era un hombre violento, cosa que parecía estar olvidando esa tarde, primero con Sebastian y luego con lo que había terminado por lastimar su mano... Y una señal de como cada uno lidiaba a su forma con el dolor. Ella no podía hacer nada más que llorar y William... Bueno, William parecía dispuesto a golpear todo lo que se le pusiera por delante.

Se incorporó un poco en la cama y estaba a punto de pedirle que se quitara ese vendaje para que pudiera ver el alcance de la lesión y en caso necesario ayudarle a que se lo desinfectara bien cuando la alcaldesa entró en la habitación. Seguramente era la última persona que Grace esperaba ver allí, y por un instante la sorprendió la velocidad con la que se había extendido la notícia. Para ese entonces seguramente todo Storybrooke debía estar al corriente de la desgracia... Sólo esperaba que no todos llegaran a visitarla, porque se sentía incapaz de fingir que todo iba a estar bien con el tiempo con tanta gente cuando en su interior tenía la seguridad que en realidad nada iba a estar bien.

Nunca había tenido más relación con su alcaldesa que la que tendría cualquier otro habitante de Storybrooke. Había asistido a sus fiestas anuales en el ayuntamiento, había escuchado todos sus discursos y la había felicitado en un par de veces por ellos, pero poco más. Por eso su presencia ahí, diciéndole cuanto sentía lo ocurrido no podía dejar de incrementar aquella sensación de irrealidad entorno a aquella tarde y alimentaba aquella pequeña parte de ella misma que le decía que todo eso no podía estar pasando de verdad.

¿Que una mujer nunca debería pasar por aquello? No estaba del todo de acuerdo con eso. Quizás ella lo merecía. Quizás había hecho demasiadas cosas malas y era una persona horrible de forma suficiente para que aquello fuera justo lo que debía pasarle a ella...
Aún así intentó dirigirle una sonrisa a Siobhan, cosa en la que no tuvo mucho éxito, sobretodo cuando mencionó la suerte que tenía al tener un marido como William. Si, ya... No creía que aquello fuera a ser una situación que durara mucho más...

- Gracias por las flores y... por la visita... Yo... intentaré ser fuerte por las personas que están a mi lado... – dijo simplemente, y aquello fue dicho tanto para la alcaldesa como para indicarle a William que lo intentaría. Intentaría sobreponerse y seguir adelante... Intentaría no darle otra cosa por la que preocuparse, porque ya había demasiado sufrimiento como para añadirle más... Pero la verdad, de no saber quienes eran aquellas personas que seguirían a su lado después de todo fue lo que hizo que un par de lágrimas volvieran a rodar por sus mejillas.

Y por entre todas las capas de dolor que caían pesadas sobre ella empezó a sentir miedo. Miedo por lo que podría haber sido y no fue... Miedo por enfrentarse a las consecuencias de todo aquello... Y sobretodo miedo por no saber que pasaría con su vida a partir de esa tarde.
Grace E. Sullivan
Grace E. Sullivan
Realeza
Realeza

Soy : Princesa Aurora
Mensajes : 253
Empleo /Ocio : Enfermera
Fecha de inscripción : 04/06/2012

Volver arriba Ir abajo

A deal is a deal Empty Re: A deal is a deal

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.